¿Qué sabemos al día de hoy sobre aprender?
¿Qué sabemos al día de hoy sobre “Aprender”?
Toda formación docente incluye necesariamente un paso por los aportes de la psicología al aprendizaje humano y escolarizado, al igual que a la psicología del desarrollo. Y en verdad ha sido amplia, diversa y cambiante la contribución de esta ciencia a la pedagogía, hecho que ha dado como resultado una mixtura de prácticas pedagógicas, muchas veces no exentas de contradicciones.

Todos recordarán el proyecto conductista - asociacionista, predominante en los inicios del siglo XX con figuras como Pavlov, Watson y Skinner.
Este enfoque se centraba en el estudio observable del comportamiento y las respuestas a estímulos externos, subrayando el papel del condicionamiento. Para ellos, el aprendizaje implicaba un cambio en el comportamiento observable, resultado de la asociación entre estímulos y respuestas. Ya sea vía condicionamiento clásico (Pavlov) o bien operante (Skinner), el aprendizaje era entendido como un proceso mecánico y observable, jugando el entorno un papel crucial. Animales y personas compartían idénticos procesos y el conocimiento producido en entornos experimentales se trasladaba directamente al aula. El conductismo no focalizó en los procesos mentales internos, ya que los consideraba subjetivos y difíciles de medir científicamente. Un cierto avance en este modelo vino de la mano de Albert Bandura un neo conductista que formuló su teoría del aprendizaje social. Este enfoque postula que las personas aprenden nuevas conductas y comportamientos observando e imitando a los demás. Bandura sostenía la importancia de los modelos provenientes del entorno, como padres, maestros y compañeros, y el papel de la imitación, la observación y el refuerzo en el proceso de aprendizaje. Seguramente recordarán el famoso experimento del “muñeco bobo” que sirvió para fundamentar conceptos clave como el modelado, la autoeficacia y el aprendizaje vicario.
La novedad respecto a sus predecesores venía de subrayar que el aprendizaje puede ocurrir sin cambios inmediatos en el comportamiento, ya que las personas internalizan lo observado y pueden manifestar lo aprendido cuando las condiciones son adecuadas.
Más allá de los debates en torno a esta perspectiva, es innegable que dejó una importante huella en la pedagogía y no hay educador que no haya incorporando en sus estrategias de enseñanza las leyes y curvas del aprendizaje de Thorndike, el papel del reforzamiento positivo hacia el alumno y el uso de la repetición y la memoria.
![]()